Un restaurante sin carta
La novedad de Baldomero no solo reside en un espacio que finalmente sigue coherentemente, su idea de casa de campo, desde el principio hasta el final, sino, ofreciendo a los comensales una forma totalmente diferente de comer y compartir ese momento.
Si hasta ahora hemos estado acostumbrados a comer eligiendo de una carta que puede cambiar según temporada, en Baldomero descubrirás que no existe una carta y que los platos podrás verlos y elegirlos desde una mesa donde, a diario, se comparten las simples y sanas creaciones de su cocinera.
¿Pero, qué cocina hacen? Las recetas de Baldomero se inspiran en nuestro adorado Yotam Ottolenghi, un chef que como Antonella Tignanelli, cree que la cocina tiene que ser una fusión simple y equilibrada entre ingredientes locales y exóticos. Un mix entre un estilo moderno, oriental, mediterráneo e incluso de Europa del norte o Londres.
Dicho esto, aquí no encontrarás platos sofisticados, sino una cocina muy rica, equilibrada por su oferta de carnes, verduras y pescado, que mimarán tu estómago y harán feliz a tu estado de ánimo, acompañado de un buen café de especialidad de Nomad Coffee.
Desde septiembre 2020 abren también los fines de semana, con formato brunch de 11:30h a 16:30h (reserva previa), siempre al estilo Baldomero: con buffet completísimo, rico y sano.
Y por cierto, ¿sabes qué fue lo que más nos emocionó? El cordero y la tarta de pistacho.