La chef Fabiola Lairet ofrece una sorprendente experiencia japo-californiana en su restaurante Robata, un lugar elegante y acogedor donde almorzar o cenar con sabrosas gyozas, yakitoris, uramaki o sushi, siempre es un acierto.
Iluminación tenue, mesas de mármol negro, asientos de piel, vajilla artesanal son aspectos que definen a priori este restaurante. No obstante, la experiencia en Robata va más allá de una mera decoración elegante, sobre todo, cuando averiguas que al mando de este proyecto gastronómico está Fabiola Lairet, la precursora de Monster Sushi.
La chef y co-fundadora de ambos locales siempre ha sido una apasionada de la gastronomía y afinó sus conocimientos en ciudades como Los Angeles y Japón. En parte, a raíz de esas vivencias pasadas que surge Robata, un restaurante que sintetiza y fusiona de forma armónica la perfección japonesa y el toque occidental californiano un su consistente carta.
Sea en el interior del restaurante o en su verde terraza, en Robata te sentirás a gusto y listo para empezar un festín gastronómico que va desde el tradicional sushi hasta la jugosa brocheta de carne a la brasa. De hecho, es precisamente de este tipo de cocción de donde proviene el apelativo “Robata”, que se refiere a la brasa japonesa.
De entre los platos que probamos durante nuestra visita destacamos: la brocheta de pollo, los edamames a la brasa (que gracias a las vainas de soja resultan de lo más especiales), el tierno pulpo con salsa de olivas kalamata y en general, todas sus versiones de uramaki o nigiris. El ágape está asegurado y el consenso de amigos, pareja y familiares garantizado.
"De esos locales que no pararías de hacer fotos del espacio, comida o selfies" - Stefania
"El ticket medio es caro, pero los nigiris y demás sushi que probé estaban muy buenos" - Andreu
Lunes a Domingo
13:30h – 23:30h
